lunes, 28 de mayo de 2012

CRÍTICA: El verano sin hombres. Siri Hustvedt


PATRICIA DE SOUZA . El País. 28 ENE 2012
Narrativa. Difícil escribir un libro en primera persona siendo mujer y no ser considerada como "feminista". Es lo que sucede con la novela de Siri Hustvedt (Estados Unidos, 1955), El verano sin hombres, en la cual la protagonista, escritora también, sufre una "sicosis reactiva" el día en que Boris, su esposo, decide dejarla por una mujer mucho más joven. Hasta ahí la historia es banal, cientos de mujeres pueden contar la misma anécdota tentadas de caer en la venganza o la ridiculización del ser querido. Lo importante es que aunque la novela sea de corte bastante clásico, combinaciones de imperfecto con pasado simple, esto le permite a la autora mantener una distancia (un exterior que no llega a ser interior como el presente del indicativo) con su personaje que saldrá de la crisis, se acercará a un grupo de mujeres ancianas (los cisnes), entre ellas, su madre, y logrará organizar su vida, a punto de ser fantasmal, socialmente congelada, casi invisible. Flash-backs de instantes dolorosos, humillaciones de género, renuncias individuales a las que el personaje está acostumbrado y crítica de todo ese pasado próximo, alborotada, arañando las paredes, pero que no me servía para nada. Ahí radica la magia de la autoridad, el dinero y los penes (página 17). Magia que por supuesto la seduce en una especie de relación sadomasoquista con el hombre que la ha dejado para hacer una "pausa" en su vida y pese a las características "cerebrales" de Mía, que conceptualiza, analiza y clasifica lo que vive. Fragmentos, algunas cartas, narraciones, pocas escenas. El tempo del texto es contemplativo, sin exaltaciones, marcado por la lucidez de la edad y una capacidad de adaptación sorprendente. Todo discurre lento hasta el día en que Boris decide regresar, y ella, que había estado refugiada en dar talleres a estudiantes en plena adolescencia, capaz de observar esa transformación con cierta ternura, vuelve en sí, y con una elipsis (casi mágica) todo promete volver a la rutina. 
Esta crítica publicada en el País nos puede servir como referencia para comentar el libro en la próxima tertulia.

1 comentario:

  1. Muchas gracias.
    Un día me ayudas a repasar los tiempos verbales. Quizás más que crítica es comentario, como neutro, poco pasional y valorativo (utiliza poco el subjuntivo).

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