Juan Manuel nos acaba de mandar la presentación de la colección de escritos publicada bajo el título Placeres escritos. Recopilación variada que va desde poesía libre, relatos cortos, reflexiones filosóficas personales....y demás. Esto supone que si no te gusta un género, entonces te gustará otro, por lo que siempre encontrarás alguna satisfacción. De esta forma convertirás los Placeres escritos en placeres leídos.
“PLACERES ESCRITOS”.
ESTUDIO SOBRE LA OBRA REALIZADO POR MISAEL PULIDO ACOSTA (Escritor y docente).
Distinguido público:
Cuando Juan Manuel me pidió que le hiciera una breve presentación de su obra Placeres escritos no me lo pensé dos veces. Al comenzar a leer el libro sentí todo un derroche de imaginación por parte del escritor, que poco a poco me fue cautivando a medida que lo leía.
Cuando el lector es incapaz de abandonar el libro, es porque cae la “bomba argumental que le satisface propiamente”. Tanto su poesía como su prosa poética se componen de historias. El escritor sabe proporcionar el grado de información adecuada en todo momento, este hecho es un arte que todo buen literato debe dominar y que un buen lector debe reconocer. El autor ha conseguido atrapar al lector a través de la lectura de este trabajo.
En esta obra, vemos un cúmulo de personajes en los que nos define sus gustos, sus pasiones, sus defectos, sus emociones, los rasgos externos de su personalidad, y el modo en que se relacionan con otros personajes.
En el texto hay una variedad de temas muy bien enfocados: el amor y sus juegos, la infancia, la memoria, el creciente poder de las máquinas o la emigración. El poeta transmite las ideas relacionadas con esta serie de contenidos con absoluta claridad y fluidez. Las historias cobran vida gracias a la vitalidad de sus argumentos, de los personajes o de las reflexiones que propone.
La estructura de la obra se compone de cuatro bloques bien diferenciados: “Del crecimiento”, “Del amor”, “De los recuerdos”, y “De la civilización”.
El primer bloque, titulado “Del crecimiento”, es un conjunto muy amplio en cuanto a contenidos en el que aparecen elementos como la gran mentira que es a veces la felicidad, dándonos a conocer cómo la sociedad no es tan idílica como la pintan. Por otro lado, surgen las “Ilusiones” planteadas como una fantasía infantil. A continuación, se nos muestra una reflexión sobre los adultos en una sociedad que es ciertamente hipócrita. Asoma una ciudad en la que se busca la felicidad, al ser una urbe sin sueños, sin deseos, sin sonrisa. Se nos habla de la vida, y es percibida como un teatro en el que vemos la evolución de los niños en ese escenario que es la existencia misma. “La guerra diaria” nos ubica en que hoy en día la realidad supera a la ficción y a los niños se les mata la inocencia desde corta edad y pasan a formar parte de un sociedad violenta y sin escrúpulos. Hasta la caída de un espejo, es un componente que Juan Manuel explota como un elemento de decadencia, es decir, la caída de los valores y su paulatina desaparición. En “Meditaciones”, el poeta nos indica que hay que aplicar en la vida lo mejor de la experiencia, es un intento de atrapar la felicidad fugaz a través de la meditación, por lo tanto, tenemos que dominar nuestros pensamientos y controlar nuestros actos. El hecho de “Tocar el cielo” se convierte en un elemento de la inocencia infantil, tratando de encarnar las ilusiones de los niños, es un deseo de no perder del todo la capacidad de soñar. No obstante, el simple acto de “cerrar una puerta” representa la depresión, vemos personas que pierden la batalla en la vida y se quedan atrapados en la tristeza. Luego, un elemento como la ironía también está presente en aquel “Psiquiatra inteligente”.
Ahora bien, en “Ven” se establece un diálogo entre el propio escritor y el papel en el que va a escribir y debemos hacernos este razonamiento: ¿Muchas veces escribimos la verdad o nos engañamos a nosotros mismos y a los demás con lo que escribimos? En este momento de la lectura aflora “La mujer del diario”, es una mujer que ha perdido las batallas de la vida y ha encontrado en la locura su salvación para cumplir su sueño que sería el tener marido, el tener hijos, en conclusión, el sentirse realizada en la vida. Otro personaje que me impactó fue “El desertor”, éste es una persona que se ha alejado de la sociedad y se niega a entrar en el agotador espectáculo que hay fuera. Llegados a este punto nos adentramos en“La huella anónima”, aquí se nos alude a un montón de gente que vive una vida que no desea. Seguimos con los estereotipos y nos identificamos con “Julián”, que es un individuo al que le abandona la cordura y sus pensamientos vuelan al libre albedrío, quizás ahora tiene una vida más auténtica. Luego, nos tropezamos con dos poemas muy paralelos: “El suicida”, que se agarra a la vida por su familia y se “alimenta” de ellos para seguir luchando. En “La suicida” nos hallamos, esta vez, con una versión femenina del desencanto. El tema de la muerte también es tratado, “Los muertos”, es una reflexión sobre la gente que ya no está. Los personajes continúan intercalándose en esta obra, emerge “Carla”, ella aparece como un personaje impregnado del juego de lo cotidiano y sus ansias y deseos de escapar de esta rutina. Los mensajes subliminales cargados de un cierto simbolismo brotan en “El concierto” que es la vida misma y la sociedad como enjambre que forma parte de ésta. En la sociedad afloran los“Conspiradores”, aquí se nos invita a la siguiente consideración: ¿Es posible conspirar para cambiar la sociedad? Finalizando este primer bloque emergen dos personajes estereotipados: Por una parte,“El líder”, en el que se nos habla de la quimera del poder y de lo caduco de los liderazgos según los intereses y las conveniencias del momento. Y a continuación se presenta “El filósofo” y hace que percibamos esta meditación: “¿Qué es lo que se quiere en la vida y qué hacer para conservar lo que se tiene?” Termina este bloque con “El silencio”, que es una búsqueda de la felicidad.
Pasamos al segundo bloque titulado >“Del amor”, que comienza con “Ventana 32 en línea recta” en el que descubrimos el deseo de encontrar algo que te dé la felicidad. Continúa este bloque con “El amor”, que es una prosa poética. Aquí tenemos que reflexionar si ¿el amor se puede definir o solamente sentir? Retornamos a la senda de los personajes y nos tropezamos con “Clara”, ella es abandonada por su marido. Él se va con una adolescente y realmente, ¿se pueden perseguir los sueños sensuales como un pasaporte para la felicidad aunque sea pasajera? Posteriormente se nos muestra a “Nuria”, es un texto en el que el juego del amor y el orgullo aparecen encarnados en un hombre y una mujer. Después, el autor nos presenta a “El amante”, éste es alguien que siempre seguirá amando a pesar de las circunstancias. La obra continúa su curso y llegamos hasta “La ausencia”, en la que nace la promesa del amor que empieza y de todo lo bueno que puede traer o al menos de su ilusión. El poeta ahora se detiene en un ingrediente que se agazapa en nuestra existencia y éste es el “Tiempo” como elemento infiltrado en nuestras existencias. Cuando el amor se escapa siempre falta tiempo para retenerlo. Continúa su evolución interior y el escritor camina ahora por campos muy sensuales y así nos plasma sus ideas en “Como un juego” donde nos formula la representación del acto sexual compartido y gozado como un juego en el que los dos se ríen y disfrutan. El amor sigue caminado en el alma del poeta y en “Te quiero” se impregna de las eternas preguntas de la persona que se quiere sentir querida para siempre. En este momento, surge un texto gozoso y sensorial titulado “Mujer desnuda” es un poema placentero, es el retrato de una entrega, yo diría que una entrega en cuerpo y alma. Por otra parte, Juan Manuel también utiliza las estaciones y nos ubicamos en “Probablemente llegó la primavera”, en el que la vida renace a borbotones entre nuestras existencias cotidianas, buscando una razón para hacerla valiosa. Pero el poeta, se sigue adentrando en un mundo pleno de goce y de erotismo moldeado en “Juegos de amor”, éste se despliega ante nosotros como un poema con una tonalidad muy apasionada, mostrando el descubrimiento de la sexualidad y el placer de compartirla. A continuación, Juan Manuel, nos sigue dando pinceladas y nos hace regresar a otro de sus personajes, en este caso “Estela”, en éste se nos atrae a meditar con el hecho de que a veces las personas dejamos escapar más de una ocasión para ser felices. Y os exhorto a la siguiente cuestión derivada de lo anterior: ¿Es posible regresar al pasado para recuperar las oportunidades? Los sentimientos siguen desbordándose y vuelven a emanar en “El reencuentro”, la pareja toma aquí su protagonismo y hace de su encuentro algo nuevo y gratificante cada día. En resumen, se nos habla del placer de los amantes. Posteriormente, el autor se centra en lo contrario y llega para envolvernos en la siguiente prosa poética titulada “La despedida”, es el retrato de los que buscan una vida nueva aunque eso signifique romper completamente con el pasado. Dentro de todos estos textos, hay una gran predominancia del elemento femenino, esto nos lleva y conduce a “Una mujer”, en el que se nos transporta al descubrimiento de la soledad más profunda que a veces se esconde detrás de una teórica independencia. Seguidamente, el autor utiliza un día de la semana en este caso el “Lunes” para personificar la alegría del amante satisfecho. Luego, regresamos otra vez a un “Reencuentro” en el que se profundiza sobre los amores que nunca mueren del todo y que vuelven a empezar. Pero el autor también sabe que la vida se hace de “Recuerdos” y es dónde se nos invita a que hagamos la siguiente reflexión: ¿Realmente podemos tener la seguridad de haber encontrado el verdadero amor, aquel que buscábamos desde nuestra infancia? Este segundo bloque termina con “El limosnero del amor” situándonos en una sociedad que carece tanto de amor y… ¿Habrá que darlo como limosna?
El tercer bloque se titula “De los recuerdos”, éste se inicia con el poema “Recuerdo olvidado” y yo os invito a que penséis en lo que os digo: ¿Realmente todo se olvida o hay recuerdos tan valiosos que siempre permanecerán? El autor vuelve a utilizar los recuerdos y “La copa del recuerdo” nos indica que es bonito el recuerdo pero el presente es el que te ofrece esos recuerdos. El poeta no se ha olvidado de los estereotipos y ante nosotros se nos aparece “La vieja” que es un personaje que aparentemente todo el mundo quiere, pero sin implicarse demasiado en ese afecto, por lo tanto… ¿Vivimos en un mundo hipócrita? El escritor vuelve a redundar en las remembranzas y en “La invasión” nos remite a aquellos recuerdos que marcan nuestra vida, aspectos de ella que nunca se olvidan, y lo grandioso y espectacular de algunas reminiscencias del pasado. Después, Juan Manuel se concentra en un momento concreto para escribir sobre un“Suceso”, donde la vida te puede cambiar en un instante por un acontecimiento para bien o para mal, en este caso representado en un atropello. En otro orden de cosas, el escritor nos invita a ponernos en la piel del emigrante, que trata de buscar fortuna más allá de la tierra que le vio nacer y la reflexión de si durante toda la vida seguirá siendo emigrante. El tiempo y su paso es una constante en el rapsoda y “Ahora” es un poema en el que fluye la inmediatez de las cosas, es en cierta manera una meditación sobre el tiempo, sobre el presente que se hace pasado y sobre el futuro que está por llegar.
El tercer bloque termina con “Carta al futuro”, el autor se dirige en esta carta al destino y emerge un razonamiento sobre lo que nosotros podríamos cambiar.
El cuarto bloque se titula “De la civilización”, éste empieza con el poema “Civilizada lluvia” en el que se hace una crítica a la sociedad de consumo. Juan Manuel se implica con el medio ambiente y en “Al son de las máquinas”, nos hace sentir que éstas modelan nuestra vida, nuestras ciudades, nuestras calles. Este último bloque acaba con un “Sueño”, es el sueño de que la naturaleza triunfe sobre la sociedad artificial y que se imponga una vida más pura, a pesar de las actuaciones del hombre.
Es una obra que destaca por sus personajes, por su brillante caracterización, y por su realismo. Es un libro muy completo: temas originales, personajes vibrantes y de la vida real, y los argumentos están bien hilvanados. Son textos llenos de emotividad, de capacidad de síntesis, en fin, con una clara intencionalidad expresiva a través de una potente configuración verbal.
Ya no es únicamente el contenido del libro en términos objetivos lo que pesa sobre el lector, sino que éste, en virtud de su mentalidad, su formación, su entorno, y de la relación que mantiene con la lectura, puede reinterpretar la obra en múltiples significados, algunos de ellos más profundos que otros. Uno entiende un texto cuando confía en él, si nuestra actitud es atenta y abierta de miras, siempre aprendemos de la lectura y permitimos que ésta se vaya acumulando en nuestra mente y en nuestra conciencia formando capas de conocimiento. Son textos con una magia indefinible que hacen que el lector se impresione, se inquiete y pueda sacar sus propias conclusiones. El escritor trata de provocar los encuentros más significativos entre las palabras.
Esta obra tiene alma, tiene ese atisbo de personalidad que la diferencia de las demás, con tramas breves y originales, con planteamientos temáticos que hacen pensar al lector. Como reza el viejo refrán de los artistas “hay que dominar la técnica para olvidarse de ella”, también en la literatura es importante no confundir su ejecución con el sentido que esconde la estructura técnica en una obra. En ocasiones, los lectores nos quedamos cautivados por la belleza de los versos de un poemario, por ejemplo, pero un lector activo sabe apreciar este maravilloso dominio estilístico siempre que vaya unido a un contenido, a un alma, por muy frágil que sea su susurro.
Felicitar a Juan Manuel por este maravilloso libro y puedo afirmar que este va a ser el comienzo de una carrera plagada de muchos éxitos literarios. Muchas gracias a todos.
Misael Pulido Acosta.(Escritor y docente)
ESTUDIO SOBRE LA OBRA REALIZADO POR MISAEL PULIDO ACOSTA (Escritor y docente).
Distinguido público:
Cuando Juan Manuel me pidió que le hiciera una breve presentación de su obra Placeres escritos no me lo pensé dos veces. Al comenzar a leer el libro sentí todo un derroche de imaginación por parte del escritor, que poco a poco me fue cautivando a medida que lo leía.
Cuando el lector es incapaz de abandonar el libro, es porque cae la “bomba argumental que le satisface propiamente”. Tanto su poesía como su prosa poética se componen de historias. El escritor sabe proporcionar el grado de información adecuada en todo momento, este hecho es un arte que todo buen literato debe dominar y que un buen lector debe reconocer. El autor ha conseguido atrapar al lector a través de la lectura de este trabajo.
En esta obra, vemos un cúmulo de personajes en los que nos define sus gustos, sus pasiones, sus defectos, sus emociones, los rasgos externos de su personalidad, y el modo en que se relacionan con otros personajes.
En el texto hay una variedad de temas muy bien enfocados: el amor y sus juegos, la infancia, la memoria, el creciente poder de las máquinas o la emigración. El poeta transmite las ideas relacionadas con esta serie de contenidos con absoluta claridad y fluidez. Las historias cobran vida gracias a la vitalidad de sus argumentos, de los personajes o de las reflexiones que propone.
La estructura de la obra se compone de cuatro bloques bien diferenciados: “Del crecimiento”, “Del amor”, “De los recuerdos”, y “De la civilización”.
El primer bloque, titulado “Del crecimiento”, es un conjunto muy amplio en cuanto a contenidos en el que aparecen elementos como la gran mentira que es a veces la felicidad, dándonos a conocer cómo la sociedad no es tan idílica como la pintan. Por otro lado, surgen las “Ilusiones” planteadas como una fantasía infantil. A continuación, se nos muestra una reflexión sobre los adultos en una sociedad que es ciertamente hipócrita. Asoma una ciudad en la que se busca la felicidad, al ser una urbe sin sueños, sin deseos, sin sonrisa. Se nos habla de la vida, y es percibida como un teatro en el que vemos la evolución de los niños en ese escenario que es la existencia misma. “La guerra diaria” nos ubica en que hoy en día la realidad supera a la ficción y a los niños se les mata la inocencia desde corta edad y pasan a formar parte de un sociedad violenta y sin escrúpulos. Hasta la caída de un espejo, es un componente que Juan Manuel explota como un elemento de decadencia, es decir, la caída de los valores y su paulatina desaparición. En “Meditaciones”, el poeta nos indica que hay que aplicar en la vida lo mejor de la experiencia, es un intento de atrapar la felicidad fugaz a través de la meditación, por lo tanto, tenemos que dominar nuestros pensamientos y controlar nuestros actos. El hecho de “Tocar el cielo” se convierte en un elemento de la inocencia infantil, tratando de encarnar las ilusiones de los niños, es un deseo de no perder del todo la capacidad de soñar. No obstante, el simple acto de “cerrar una puerta” representa la depresión, vemos personas que pierden la batalla en la vida y se quedan atrapados en la tristeza. Luego, un elemento como la ironía también está presente en aquel “Psiquiatra inteligente”.
Ahora bien, en “Ven” se establece un diálogo entre el propio escritor y el papel en el que va a escribir y debemos hacernos este razonamiento: ¿Muchas veces escribimos la verdad o nos engañamos a nosotros mismos y a los demás con lo que escribimos? En este momento de la lectura aflora “La mujer del diario”, es una mujer que ha perdido las batallas de la vida y ha encontrado en la locura su salvación para cumplir su sueño que sería el tener marido, el tener hijos, en conclusión, el sentirse realizada en la vida. Otro personaje que me impactó fue “El desertor”, éste es una persona que se ha alejado de la sociedad y se niega a entrar en el agotador espectáculo que hay fuera. Llegados a este punto nos adentramos en“La huella anónima”, aquí se nos alude a un montón de gente que vive una vida que no desea. Seguimos con los estereotipos y nos identificamos con “Julián”, que es un individuo al que le abandona la cordura y sus pensamientos vuelan al libre albedrío, quizás ahora tiene una vida más auténtica. Luego, nos tropezamos con dos poemas muy paralelos: “El suicida”, que se agarra a la vida por su familia y se “alimenta” de ellos para seguir luchando. En “La suicida” nos hallamos, esta vez, con una versión femenina del desencanto. El tema de la muerte también es tratado, “Los muertos”, es una reflexión sobre la gente que ya no está. Los personajes continúan intercalándose en esta obra, emerge “Carla”, ella aparece como un personaje impregnado del juego de lo cotidiano y sus ansias y deseos de escapar de esta rutina. Los mensajes subliminales cargados de un cierto simbolismo brotan en “El concierto” que es la vida misma y la sociedad como enjambre que forma parte de ésta. En la sociedad afloran los“Conspiradores”, aquí se nos invita a la siguiente consideración: ¿Es posible conspirar para cambiar la sociedad? Finalizando este primer bloque emergen dos personajes estereotipados: Por una parte,“El líder”, en el que se nos habla de la quimera del poder y de lo caduco de los liderazgos según los intereses y las conveniencias del momento. Y a continuación se presenta “El filósofo” y hace que percibamos esta meditación: “¿Qué es lo que se quiere en la vida y qué hacer para conservar lo que se tiene?” Termina este bloque con “El silencio”, que es una búsqueda de la felicidad.
Pasamos al segundo bloque titulado >“Del amor”, que comienza con “Ventana 32 en línea recta” en el que descubrimos el deseo de encontrar algo que te dé la felicidad. Continúa este bloque con “El amor”, que es una prosa poética. Aquí tenemos que reflexionar si ¿el amor se puede definir o solamente sentir? Retornamos a la senda de los personajes y nos tropezamos con “Clara”, ella es abandonada por su marido. Él se va con una adolescente y realmente, ¿se pueden perseguir los sueños sensuales como un pasaporte para la felicidad aunque sea pasajera? Posteriormente se nos muestra a “Nuria”, es un texto en el que el juego del amor y el orgullo aparecen encarnados en un hombre y una mujer. Después, el autor nos presenta a “El amante”, éste es alguien que siempre seguirá amando a pesar de las circunstancias. La obra continúa su curso y llegamos hasta “La ausencia”, en la que nace la promesa del amor que empieza y de todo lo bueno que puede traer o al menos de su ilusión. El poeta ahora se detiene en un ingrediente que se agazapa en nuestra existencia y éste es el “Tiempo” como elemento infiltrado en nuestras existencias. Cuando el amor se escapa siempre falta tiempo para retenerlo. Continúa su evolución interior y el escritor camina ahora por campos muy sensuales y así nos plasma sus ideas en “Como un juego” donde nos formula la representación del acto sexual compartido y gozado como un juego en el que los dos se ríen y disfrutan. El amor sigue caminado en el alma del poeta y en “Te quiero” se impregna de las eternas preguntas de la persona que se quiere sentir querida para siempre. En este momento, surge un texto gozoso y sensorial titulado “Mujer desnuda” es un poema placentero, es el retrato de una entrega, yo diría que una entrega en cuerpo y alma. Por otra parte, Juan Manuel también utiliza las estaciones y nos ubicamos en “Probablemente llegó la primavera”, en el que la vida renace a borbotones entre nuestras existencias cotidianas, buscando una razón para hacerla valiosa. Pero el poeta, se sigue adentrando en un mundo pleno de goce y de erotismo moldeado en “Juegos de amor”, éste se despliega ante nosotros como un poema con una tonalidad muy apasionada, mostrando el descubrimiento de la sexualidad y el placer de compartirla. A continuación, Juan Manuel, nos sigue dando pinceladas y nos hace regresar a otro de sus personajes, en este caso “Estela”, en éste se nos atrae a meditar con el hecho de que a veces las personas dejamos escapar más de una ocasión para ser felices. Y os exhorto a la siguiente cuestión derivada de lo anterior: ¿Es posible regresar al pasado para recuperar las oportunidades? Los sentimientos siguen desbordándose y vuelven a emanar en “El reencuentro”, la pareja toma aquí su protagonismo y hace de su encuentro algo nuevo y gratificante cada día. En resumen, se nos habla del placer de los amantes. Posteriormente, el autor se centra en lo contrario y llega para envolvernos en la siguiente prosa poética titulada “La despedida”, es el retrato de los que buscan una vida nueva aunque eso signifique romper completamente con el pasado. Dentro de todos estos textos, hay una gran predominancia del elemento femenino, esto nos lleva y conduce a “Una mujer”, en el que se nos transporta al descubrimiento de la soledad más profunda que a veces se esconde detrás de una teórica independencia. Seguidamente, el autor utiliza un día de la semana en este caso el “Lunes” para personificar la alegría del amante satisfecho. Luego, regresamos otra vez a un “Reencuentro” en el que se profundiza sobre los amores que nunca mueren del todo y que vuelven a empezar. Pero el autor también sabe que la vida se hace de “Recuerdos” y es dónde se nos invita a que hagamos la siguiente reflexión: ¿Realmente podemos tener la seguridad de haber encontrado el verdadero amor, aquel que buscábamos desde nuestra infancia? Este segundo bloque termina con “El limosnero del amor” situándonos en una sociedad que carece tanto de amor y… ¿Habrá que darlo como limosna?
El tercer bloque se titula “De los recuerdos”, éste se inicia con el poema “Recuerdo olvidado” y yo os invito a que penséis en lo que os digo: ¿Realmente todo se olvida o hay recuerdos tan valiosos que siempre permanecerán? El autor vuelve a utilizar los recuerdos y “La copa del recuerdo” nos indica que es bonito el recuerdo pero el presente es el que te ofrece esos recuerdos. El poeta no se ha olvidado de los estereotipos y ante nosotros se nos aparece “La vieja” que es un personaje que aparentemente todo el mundo quiere, pero sin implicarse demasiado en ese afecto, por lo tanto… ¿Vivimos en un mundo hipócrita? El escritor vuelve a redundar en las remembranzas y en “La invasión” nos remite a aquellos recuerdos que marcan nuestra vida, aspectos de ella que nunca se olvidan, y lo grandioso y espectacular de algunas reminiscencias del pasado. Después, Juan Manuel se concentra en un momento concreto para escribir sobre un“Suceso”, donde la vida te puede cambiar en un instante por un acontecimiento para bien o para mal, en este caso representado en un atropello. En otro orden de cosas, el escritor nos invita a ponernos en la piel del emigrante, que trata de buscar fortuna más allá de la tierra que le vio nacer y la reflexión de si durante toda la vida seguirá siendo emigrante. El tiempo y su paso es una constante en el rapsoda y “Ahora” es un poema en el que fluye la inmediatez de las cosas, es en cierta manera una meditación sobre el tiempo, sobre el presente que se hace pasado y sobre el futuro que está por llegar.
El tercer bloque termina con “Carta al futuro”, el autor se dirige en esta carta al destino y emerge un razonamiento sobre lo que nosotros podríamos cambiar.
El cuarto bloque se titula “De la civilización”, éste empieza con el poema “Civilizada lluvia” en el que se hace una crítica a la sociedad de consumo. Juan Manuel se implica con el medio ambiente y en “Al son de las máquinas”, nos hace sentir que éstas modelan nuestra vida, nuestras ciudades, nuestras calles. Este último bloque acaba con un “Sueño”, es el sueño de que la naturaleza triunfe sobre la sociedad artificial y que se imponga una vida más pura, a pesar de las actuaciones del hombre.
Es una obra que destaca por sus personajes, por su brillante caracterización, y por su realismo. Es un libro muy completo: temas originales, personajes vibrantes y de la vida real, y los argumentos están bien hilvanados. Son textos llenos de emotividad, de capacidad de síntesis, en fin, con una clara intencionalidad expresiva a través de una potente configuración verbal.
Ya no es únicamente el contenido del libro en términos objetivos lo que pesa sobre el lector, sino que éste, en virtud de su mentalidad, su formación, su entorno, y de la relación que mantiene con la lectura, puede reinterpretar la obra en múltiples significados, algunos de ellos más profundos que otros. Uno entiende un texto cuando confía en él, si nuestra actitud es atenta y abierta de miras, siempre aprendemos de la lectura y permitimos que ésta se vaya acumulando en nuestra mente y en nuestra conciencia formando capas de conocimiento. Son textos con una magia indefinible que hacen que el lector se impresione, se inquiete y pueda sacar sus propias conclusiones. El escritor trata de provocar los encuentros más significativos entre las palabras.
Esta obra tiene alma, tiene ese atisbo de personalidad que la diferencia de las demás, con tramas breves y originales, con planteamientos temáticos que hacen pensar al lector. Como reza el viejo refrán de los artistas “hay que dominar la técnica para olvidarse de ella”, también en la literatura es importante no confundir su ejecución con el sentido que esconde la estructura técnica en una obra. En ocasiones, los lectores nos quedamos cautivados por la belleza de los versos de un poemario, por ejemplo, pero un lector activo sabe apreciar este maravilloso dominio estilístico siempre que vaya unido a un contenido, a un alma, por muy frágil que sea su susurro.
Felicitar a Juan Manuel por este maravilloso libro y puedo afirmar que este va a ser el comienzo de una carrera plagada de muchos éxitos literarios. Muchas gracias a todos.
Misael Pulido Acosta.(Escritor y docente)
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