RETOMEMOS la entrada del día 16 de octubre de 2010... nuestra próxima lectura de tertulia.
Lecturalia.
Los padres de Cristina Esquivel, una geriatra a la que han encontrado estrangulada en su piso de Madrid, contratan al detective Arturo Zarco para que encuentre al asesino. En verdad, lo que desean y esperan, es que inculpe a Yalal, el albañil marroquí con el que estaba casada la muerta y que ahora tiene la custodia de la hija de ambos.
Zarco es un detective muy poco convencional: cuarentón, gay y aún estrechamente ligado a Paula, su ex mujer, a la que cuenta y con la que discute por teléfono las vicisitudes de la investigación y hasta los pormenores de sus fascinaciones eróticas. Pero bajo la superficie de las charlas, tras el relato del ir y venir de vecinos sospechosos y de presuntos implicados, la conversación telefónica entre el detective y Paula se convierte en un pretexto para la dominación y la venganza, para el daño que se quieren infligir dos personajes que se odian, se aman, se necesitan y se repelen. Hasta que el forcejeo dialéctico entre Zarco y Paula queda, de repente, interrumpido por el diario de la enfermedad de Luz, una de las vecinas de la geriatra asesinada, y madre de Olmo, el jovencito que fascina y perturba a Zarco.
Un relato interfiere en el otro relato y el encanto y la seducción de lo reconocible se suspenden.
"Black, black, black" es una espléndida novela negra que puede leerse como tal, pero también, y sobre todo, como otra cosa, puesto que Marta Sanz nos propone una lectura insurgente sobre la violencia del sistema, sobre su imperfección, un relato donde la idea del crimen como resultado de la fricción social, de algo más terrible que las patologías, abre la posibilidad de una investigación psicológica que profundice en las relaciones de causa y efecto y no se base solamente en las pruebas de laboratorio y en las mesas de los forenses.
Comentarios de nuestro querido Margarito...
Los padres de Cristina Esquivel, una geriatra a la que han encontrado estrangulada en su piso de Madrid, contratan al detective Arturo Zarco para que encuentre al asesino. En verdad, lo que desean y esperan, es que inculpe a Yalal, el albañil marroquí con el que estaba casada la muerta y que ahora tiene la custodia de la hija de ambos.
Zarco es un detective muy poco convencional: cuarentón, gay y aún estrechamente ligado a Paula, su ex mujer, a la que cuenta y con la que discute por teléfono las vicisitudes de la investigación y hasta los pormenores de sus fascinaciones eróticas. Pero bajo la superficie de las charlas, tras el relato del ir y venir de vecinos sospechosos y de presuntos implicados, la conversación telefónica entre el detective y Paula se convierte en un pretexto para la dominación y la venganza, para el daño que se quieren infligir dos personajes que se odian, se aman, se necesitan y se repelen. Hasta que el forcejeo dialéctico entre Zarco y Paula queda, de repente, interrumpido por el diario de la enfermedad de Luz, una de las vecinas de la geriatra asesinada, y madre de Olmo, el jovencito que fascina y perturba a Zarco.
Un relato interfiere en el otro relato y el encanto y la seducción de lo reconocible se suspenden.
"Black, black, black" es una espléndida novela negra que puede leerse como tal, pero también, y sobre todo, como otra cosa, puesto que Marta Sanz nos propone una lectura insurgente sobre la violencia del sistema, sobre su imperfección, un relato donde la idea del crimen como resultado de la fricción social, de algo más terrible que las patologías, abre la posibilidad de una investigación psicológica que profundice en las relaciones de causa y efecto y no se base solamente en las pruebas de laboratorio y en las mesas de los forenses.
Comentarios de nuestro querido Margarito...
El viernes 26 de noviembre nos reunimos María José, Amparo, Angeles, Bego, Cristi, Domingo, Lourdes y Luis (Isa, Ernesto y Ana no pudieron asistir aunque sí dejaron mensaje acerca del libro) en una pequeña habitación reservada en el Empedrado, por 18 euros comimos, bebimos e incluso gritamos. Me sorprendió la comida por la calidad pareja de todos los platos y la relación calidad precio del vino, a pesar del malentendido.
La reunión fue entretenida y agradable destacamos la presentación de los nombres y las razones de estos hecha por Luis. La discrepancia fundamental fue acerca del interés de los distintos black, aunque el recurso narrativo de utilizar distintos tonos y narradores en cada uno se consideró más que acertado, en concreto sobre el segundo que algunos consideraron el núcleo de la novela en el que se da una visión de todos los personajes. Otros, en especial el ausente Ernesto, consideraban esta segundo black pesado y de difícil digestión al hacernos sufrir un salto muy grande en la manera de presentar los personajes. Un cojo momentáneo consideró como de forma demasiado caricaturesca la cojera de la protagonista. En general se destacaron las cualidades de enganche del macgufin tipo novela de asesinatos, pero también se valoró el aspecto de descripción social del microcosmos de la escalera que permitía mirarnos y vernos reflejados, aunque la capacidad de juzgar de la autora es tremenda, no escapando libre de culpa o de sospecha ningún personaje, mejor dicho: nadie.
Vídeo: Marta Sanz. "Black, black, black". 23 de marzo de 2010.
Ahora, recordemos otro "Black is black" de Los Bravos; qué recuerdos...
Vídeo: Los Bravos_Black is black. Vídeo de Los Bravos de su famoso hiiiit!
Y si a Black le quitamos la letra "L" podemos encontrarnos con... Amy Winehouse "Back To Black".
Vídeo: official video for "Back To Black".
Vídeo: Marta Sanz. "Black, black, black". 23 de marzo de 2010.
Ahora, recordemos otro "Black is black" de Los Bravos; qué recuerdos...
Vídeo: Los Bravos_Black is black. Vídeo de Los Bravos de su famoso hiiiit!
Y si a Black le quitamos la letra "L" podemos encontrarnos con... Amy Winehouse "Back To Black".
Vídeo: official video for "Back To Black".
Querido Margarito:
ResponderEliminarmuchas gracias por olvidarte de mí!!! Ya sé que era el chófer pero también participé en la tertulia ¿recuerdas?
Como ya hace algún tiempo de esta entrada (aunque yo no la había leído) no sé si llegarás a leer el comentario, así que te lo recordaré en nuestra próxima cita tertuliana.
Por cierto, acabo de terminar los deberes... TODOS!!! Es verdad que se leían de un tirón.
Saludos y hasta la próxima.
Mª José (la ausente presente)
¡Cuánto lo siento!
ResponderEliminarDisculpa.