viernes, 6 de abril de 2012

"Los papalagi" Tuiavii de Tiavea






María José me hizo esta Semana Santa más grata al prestarme esta visión alternativa de la cultura occidental. Alternativa aparentemente ya que en la actualidad en muchos aspectos es compartida, aunque no ejercitada. En los años veinte del siglo pasada un jefe de una aldea de una isla de Samoa paseó y estudió en Europa. Su choque cultural fue tal que escribió unas narraciones describiendo la forma de vida de los papalagi, los habitantes de las urbes europeas. Estas historias temáticas se transmiten en un lenguaje sencillo y poético, pero salpicado por términos en el idioma original que, a pesar, de las notas a pie de página hacen la lectura un poco dificultosa aunque le dan mayor verismo. Esto se compensa con unas ilustraciones que aligeran esta compilación de textos.






Los temas son heterogéneos pero con la continuidad de la sorpresa ante la necesidad de tener cosas y de producirlas, así como el fetichismo del dinero y la falsa e hipócrita espiritualidad, curioso resulta la descripción de cómo valoramos saber mucho sobre nada a basa de especulación lo más teórica y abstracta posible. Frente a esto se contrapone un hedonismo vitalista de convivencia y disfrute de la naturaleza y la humanidad. El buen salvaje nos hace unas descripciones fuertemente valorativas con la intención de advertir a sus vecinos de l amenaza creciente y del empeño fagocitador de la cultura asentada sobre la economía capitalista. En su viaje, inverso al de los viajeros románticos precoloniales, aprende una lección que quiere compartir: no es posible la convivencia pacífica con quien quiere conquistarte para sus mercados a través del engaño de la cultura y la religión.
Me hizo bien la propuesta de María José que a su vez le fue sugerida por n profesor de Filosofía mientras estudiaba B.U.P.. Contribuyó su lectura a airear mi visión, bastante etnocéntrica, de la propia cultura y relativizar valores como la lectura que, en muchas ocasiones, sustituyen de forma inútil a la amistad y a la vida. En justicia hay que añadir que este blog es un ejemplo de como la lectura contribuye a la comunicación y fortalecimiento de las relaciones humanas con el mejor conocimiento del otro y por lo tanto de uno mismo.

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